La crisis climática convierte al Amazonas en un desierto, dejando a comunidades indígenas y especies sin su fuente de vida.
Noticias Cop16.
El río Amazonas, que alguna vez fue la arteria vital de la selva y símbolo de biodiversidad, enfrenta hoy la sequía más grave de los últimos cincuenta años.
Este gigante fluvial, que nutre los ecosistemas más ricos del planeta, se ha convertido en un escenario desolador y casi irreconocible.
La disminución de su caudal ha alcanzado niveles alarmantes, con una reducción de hasta el 90% en algunas zonas, según el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM).
Lea: Qué son los ‘ríos voladores’ del Amazonas y qué tienen que ver con las lluvias en Colombia
El impacto de esta sequía extrema es devastador y afecta a comunidades indígenas que dependen del Amazonas para sobrevivir.



El cambio climático, los efectos de fenómenos como El Niño, y la creciente deforestación han conspirado para transformar el Amazonas en una franja de arena seca y resquebrajada.
Los habitantes, desesperados, enfrentan la falta de agua potable, el colapso del transporte fluvial y el desplome de actividades económicas como la pesca y el turismo.
La biodiversidad en riesgo: ¿estamos perdiendo el pulmón del planeta?
La Amazonía no solo es el hogar de miles de especies de flora y fauna, sino también de culturas indígenas que por siglos han preservado el equilibrio de estos ecosistemas. Sin embargo, la sequía ha alterado este frágil balance.
Especies emblemáticas, como el delfín rosado, se encuentran al borde de la extinción por la falta de agua, mientras que los peces que nutren la región disminuyen, obligando a los pescadores a recorrer mayores distancias sin garantías de un retorno fructífero.
- Qué está causando la deforestación en la Amazonía; varias actividades están dañando al ‘pulmón del mundo’
- Árbol milenario de la Amazonía está en peligro de extinción; tarda años en crecer
Los incendios forestales y la deforestación para abrir paso a la agricultura y la ganadería ilegal han incrementado el daño. Estas prácticas no solo destruyen el hábitat natural, sino que también agravan el ciclo hídrico.

En el último año, comunidades en Leticia y Puerto Nariño han reportado que sus medios de vida tradicionales ya no les proveen lo esencial. Para ellos, el Amazonas no es solo un recurso: es un ser vivo que ha nutrido sus costumbres, creencias y modos de vida.
Comunidad y naturaleza en el olvido: ¿qué se necesita para salvar el Amazonas?
En una región olvidada por el gobierno, líderes indígenas claman por el acceso a agua potable y atención sanitaria. «El agua es la vida, y sin eso el ser humano no puede vivir,» señala un líder de la comunidad Yaguas.
La situación en el Amazonas colombiano refleja una crisis que afecta a todos los países que comparten la Amazonía, una crisis que ha puesto al borde del colapso uno de los ecosistemas más importantes de la Tierra.



Expertos advierten que, de no tomarse medidas urgentes, la Amazonía podría alcanzar un punto de no retorno.
La sequía es solo la punta del iceberg de un problema ambiental que se gesta desde hace décadas, y que, de seguir sin control, podría convertir este paraíso natural en un árido desierto, perdiendo la fuente de vida y riqueza que caracteriza a esta región.
Más: