Desde hace más de 14 años existe la Asociación Pomuna o Poder de Mujer Unido con la Naturaleza, en el Consejo Comunitario de la Comunidad Negra de Cabeceras, bajo San Juan, Buenaventura.
Noticias Valle.
En la comunidad de Cabeceras, bajo San Juan en Buenaventura, un grupo de mujeres ha logrado recuperar y preservar los conocimientos ancestrales sobre plantas medicinales que estuvieron al borde de la extinción.
Desde hace más de 14 años, la Asociación Pomuna (Poder de Mujer Unido con la Naturaleza) se ha dedicado a la elaboración de productos medicinales ancestrales, respetando y protegiendo cada recurso natural que utilizan.
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Patricia Mosquera, una de las integrantes de Pomuna, le afirmó a la CVC que decidieron formar este grupo dentro de su comunidad para trabajar con plantas y elaborar ungüentos para dolores musculares, inflamaciones, rinitis, cefaleas y otras dolencias.
Esta labor no solo implica el uso de plantas medicinales, sino también un profundo compromiso con la historia y la identidad de su pueblo. La consigna de Pomuna es clara: «un pueblo que pierde su historia, es un pueblo que tiende a desaparecer». Por ello, estas mujeres trabajan incansablemente para asegurar que los conocimientos ancestrales sobre plantas medicinales no se pierdan.
Transmisión de conocimientos de sabedoras
Uno de los aspectos más destacados del trabajo de Pomuna es la transmisión de conocimientos de las sabedoras, las primeras doctoras de la comunidad, a las nuevas generaciones. Este proceso ha sido vital para mantener viva la tradición y asegurar que los saberes ancestrales continúen siendo parte integral de la comunidad.
Magaly Mosquera, funcionaria de la CVC DAR Pacífico Oeste, ha manifestado que durante el proceso de consolidación de Pomuna, la Corporación ha apoyado en la organización de la asociación a través de la Ventanilla de Negocios Verdes.
Gracias a este soporte, las mujeres de Pomuna han adquirido materiales esenciales, como una máquina destiladora de aceites esenciales, que les permite mejorar la calidad de sus productos. Además, este apoyo ha sido crucial para motivar a estas mujeres a enseñar sus conocimientos ancestrales a los jóvenes de la comunidad educativa.
La enseñanza a las nuevas generaciones no solo garantiza la continuidad de los saberes, sino que también empodera a los jóvenes, dándoles un sentido de identidad y pertenencia.
Incentivos para curar y preservar la Naturaleza
El trabajo de Pomuna va más allá de la elaboración de productos medicinales; es una forma de incentivar la curación tanto del cuerpo humano como del entorno natural. Estas mujeres han logrado reproducir algunas especies de plantas que estaban en peligro de extinción, utilizando técnicas de cultivo orgánico que respetan el equilibrio ecológico.
La inclusión y el empoderamiento de estas mujeres es una prioridad para la CVC, que reconoce los resultados positivos obtenidos por Pomuna y los considera dignos de ser replicados en otras comunidades.
La labor de estas mujeres no solo tiene un impacto en la salud de los habitantes de Cabeceras, sino que también promueve la sostenibilidad ambiental.
Los productos de Pomuna son altamente valorados en la comunidad, al punto que muchas personas recurren primero a ellas ante cualquier enfermedad, debido a la efectividad de sus ungüentos y remedios a base de plantas.
Para aquellos interesados en conocer más sobre este negocio verde o en adquirir sus productos, pueden comunicarse al 310 683 4969 o al 312 291 1367. También se puede obtener más información a través del portal de la Ventanilla Verde de la CVC en https://ventanillaverde.cvc.gov.co/.
Esta nota ha sido realizada con el apoyo de Selvazia.