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Se había quedado sin trabajo en el hotel y decidió con su bicicleta y fiel compañera, salir a rebuscarse haciendo domicilios.

Hace seis días Juan Carlos, que empezaba como domiciliario, fue asesinado en medio de un robo en Bogotá, él había llegado a una casa a dejar unas hamburguesas pero antes que el cliente saliera a recibirle, llegó un ladrón armado, le pidió el celular y la plata, terminó dándole un tiro; lo mató y huyó, en un carro lo esperaban su novia y una amiga.

Con los días ha trascendido que los involucrados en el crimen podrían, por lo menos las mujeres, haber participado antes en hechos como estos.

Triple tragedia, los Galvez perdieron a su hijo, hermano, a su ser querido, y por lo menos dos familias más ahora viven la pesadilla de un proceso judicial, por homicidio como el delito más grave.

Los tres delincuentes están capturados, a las pocas horas la Policía Metropolitana de Bogotá los ubicó. Enfrentan delitos como:

  • Homicidio
  • Porte ilegal de armas de fuego

Y podrían sumarles concierto para delinquir. Las autoridades no han informado si tienen antecedentes.

El asaltante se bajó y le disparó al domiciliario, en el carro lo esperaban su novia y una amiga.

Ahora, cuando siguen el proceso privados de libertad, investigan en qué otros atracos están involucrados.

Juan Carlos se lanzó como domiciliario para no quedarse sin hacer nada y sin ingresos en su casa.

Había hecho ese 1 de junio un «buen día», varios pedidos, montar en bicicleta era su pasión y por eso, se le hacía fácil manejarla para prestar este servicio. También conocía de direcciones.

La fatídica noche lo puso en una calle del barrio Ciudad Jardín Sur, en la Localidad de Antonio Nariño, a donde mientras timbraba para entregar un pedido un hombre se le acercó a robarlo.

Juan Carlos Gálvez no había tenido que lidiar con una situación parecida antes.

Le insistía al ladrón que se calmara, y el delincuente blandía la pistola hasta que finalmente, le disparó.

El hermano escuchó todo

Según cuenta su hermano, el pedido que llevaba el domiciliario costaba $70 mil. Pero los asaltantes habrían intentado robarle su celular.

Los dos hermanos habrían tenido una conversación por teléfono mientras a Juan Carlos lo intentaban robar.

domiciliario Bogotá
El hermano de Juan Carlos escuchó por teléfono cuando atracaban a su hermano.

“Lo último que escuché fue que hizo como ‘ah, me jodieron’ ”. El hermano de Juan Carlos alcanzó a llegar hasta el sitio en donde fue herido y lo encontró con vida. Sin embargo, murió antes de llegar a la clínica por el disparo.

Juan Carlos, cuentan sus conocidos, se destacaba por ser un gran trabajador y profesional. También, por sus deseos de salir adelante y su amor por el trabajo.

De hecho, fue por ejercer una labor que no era la suya que encontró la muerte.

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