‘La negra’ como la conocían, estaba baliando y cuando el semáforo pasó a verde para dar paso a los vehículos corrió y se sentó en el camión cisterna. Metros adelante resbaló.
Noticias Colombia.
En la Avenida del Llano en Villavicencio ocurrió una tragedia que dejó a una habitante de calle muerta, y a un conductor de un camión cisterna en líos, porque terminó arrollada.
Un vídeo revela cuando la mujer, conocida en la zona estaba bailando en el andén, y en la vía de alto tráfico, un camión cisterna esperaba el cambio de semáforo para seguir.
‘La negra’ como la conocían, estaba baliando y cuando el semáforo pasó a verde para dar paso a los vehículos, ella se cruzó la calle y se sentó en los tubos externos del camión de carga.
El camión cisterna arrancó, ella iba sentada en las barandas de protección y metros más adelante en un movimiento de frenado, resbaló y cayó al piso, las llantas traseras le pasaron por encima.
Murió en el sitio.
El conductor no sabía que llevaba a la particular pasajera.
Muchos, lamentaron que no otros conductores o pasajeros en la vía no le hubiesen advertido de la maniobra peligrosa por parte de la habitante de calle.
Al conductor lo trasladaron a la URI, aunque hasta ahora no se ha reportado que haya quedado bajo captura, pero debía rendir declaración, y el camión fue inmovilizado.
De la mujer, hasta ahora no se conoce identidad real.
«Se fue feliz como siempre», señalaron quienes la conocían.
En la zona señalaron que era conocida y acostumbraba a pasarse la calle en medio del pesado tráfico o ‘colgarse’ de los vehículos. En varias ocasiones la habían hecho bajar.
Los últimos momentos de vida de la mujer:
Ante este tipo de imprudencias, los conductores piden a los demás actores viales avisar, «dar alguna señal».
Polizones e imprudentes
Colgarse de los vehículos en marcha, es una práctica recurrente en carreteras del país y vías de las ciudades, camioneros han denunciando que han tenido incidentes, que los ponen en riesgo a ellos, a los polizones y a los demás conductores y pasajeros de la vía.
«Se suben sin permiso», denuncian y además, cuando les piden que se bajen, «son groseros y agresivos».
Ante una frenada, las curvas, un choque están en riesgo; se han caído, ya ha habido muertos.
