Conductores que también se movilizaban por la Ruta al Sol, a la altura de el departamento de Cesar se detuvieron para ayudar al conductor de la tractomula que se estaba comportando bastante extraño y decía «voy a matar a Javier».
Noticias Colombia.
Los conductores de tractomulas recorren grandes distancias por las vías nacionales y en medio de su labor, viven todo tipo de experiencias.
Se han conocido historias por parte de los conductores en las que algunos han afirmado haber visto cosas «paranormales», mientras viajan.
Unos aseguran haber visto personas «en medio de la nada» que posteriormente desaparecen, así como también unos han contado que han visto «fantasmas o espíritus» montados en sus vehículos.
Son historias que para algunos «son difícil de creer», mientras que para otros este tipo de cosas «si existen».
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Conductor de tractomula «poseído por espíritu»
En redes sociales se ha conocido un video de un conductor de una tractomula donde aseguran que se encontraba «poseído por un espíritu».
Ocurrió la Ruta al Sol, en el sector de la Aurora, en Cesar.
Esta persona paró, estacionó el vehículo y se bajó, otros conductores al ver a su compañero estacionado, pararon pensando que se había varado, y así ayudarlo.
Pero la situación cambio cuando los otros conductores lo vieron agarrado de su vehículo, en un estado muy extraño, «¿que paso perrito?», le preguntan, sin responder nada y respirando profundamente.
Le entregan un escapulario
Sus compañeros empezaron a especular que «se le había metido un espíritu», por lo que llevan un escapulario y se lo entregan para que lo coja.
«Coja este escapulario», le dicen, mientras que el lo agarra e inmediatamente lo suelta, «ay ay quema», dice.
En medio del extraño estado del hombre, las demás personas le dicen que este tranquilo y que se relaje, «eepa contrólese».
Seguidamente, esta persona conductor de la tractomula empieza a nombrar a «Javier», diciendo que lo va a matar.
«Voy a matar a Javier, voy a matar a Javier y a sus hijos», señala, agarrado del vehículo y con extraños movimientos.
Asimismo, este comienza a gritar mientras se pone más «tenso», mientras otra persona dice «lea el salmo, lea el salvo 91», seguidamente lo acuestan.
Llamaron a la Policía, y finalmente después de un rato el hombre pudo calmarse.
Este caso ha generado todo tipo de debates, hay quienes afirman que en realidad «estaba poseído», mientras que otros señalan que al parecer estaba bajo el efecto de alguna «droga».
