Mineria Palomeque es recordada por ser una de las mujeres que socorrió a otras víctimas de la dolorosa masacre en Bojayá, en el Chocó. Hace algunos años había sido diagnosticada con esquizofrenia, bipolaridad y fue vista por última vez en el Terminal de Transportes del Norte de Medellín.
Noticias Antioquia.
Una enorme preocupación es la que hay luego de completarse cas 24 horas de la desaparición de Mineria Palomeque, sobreviviente y considerada como una de las heroínas de la masacre en Bojayá, en el Chocó.
De acuerdo a lo que se ha podido conocer hasta el momento, la última vez que fue vista fue en la Terminal de Transportes del Norte de Medellín.
Frente a la desaparición de Mineria, la Alcaldía de Medellín hizo público un cartel en donde anunciaban lo sucedido y pedía ayuda para poder ubicarla.
Así mismo a través de redes sociales muchas personas han apoyado con la intención de que ella sea encontrada sana y salva.
De igual forma, se conoció que padece de esquizofrenia y bipolaridad.
Unidad de Víctimas sobre Mineria
Sobre Mineria Palomeque Martínez, la Unidad de Víctimas durante mayo del 2022, al cumplirse 20 años de la tragedia, recordó a la mujer.
«Mineria nació hace 72 años en Murrí, municipio de Frontino (Antioquia) cerca de Vigía del Fuerte. De su infancia y adolescencia poco se sabe. Su hija Aida Mosquera, hoy de 48 años, cuenta que su madre y su padre, Luis Eduardo Mosquera, se conocieron en la década de los setenta en casa de su abuelo en Murrí, pero vivieron poco tiempo juntos y ella (Aida) fue criada por sus abuelos maternos».
“Yo nunca la llamé mamá sino ‘mella’, porque ella tuvo un hermano mellizo que se llamaba Justino, que ya falleció. También la llamaba así porque a mí me criaron mis abuelos maternos y yo poco la veía”, recuerda Aida.
Para finales de los setenta, Mineria tuvo una relación con un hombre llamado José Orfides Flórez, con quien tuvo un hijo al que bautizaron con el mismo nombre del papá. Después de unos años, la relación terminó. Para 1984, se emparejó con “un señor de nombre Bonifacio, que tenía un predio rural y con el que trabaja en cultivos cerca a Vigía del Fuerte”, explica Aida.
