En el municipio de Guachucal no salen de su asombro por esta tragedia que enluta a toda una comunidad campesina.
Noticias Nariño
Una verdadera tragedia enluta al municipio de Guachucal, en el sur de Nariño.
En esa localidad, mayormente agraria, una familia campesina sufre los peores días de su vida.
Uno de sus integrantes, un pequeño de menos de dos años falleció luego de caer a una caneca de agua.
Al parecer, el menor se encontraba jugando cuando cayó al recipiente.
Cuando sus acudientes intentaron socorrerlo ya había fallecido por inmersión.
Llanto y dolor
En la vereda Ipialpud, epicentro de este suceso, hay un dolor sin precedentes.
Allí sus habitantes se reunieron para despedir al pequeño en la iglesia San Juan Bautista.
Lo ocurrido abrió múltiples interrogantes, sin embargo hay voces en contra y a favor.
“Mucha gente señala a la familia sin conocer, seguramente fue en un abrir y cerrar de ojos.
Nadie está libre de estas tragedias”, apuntó un habitante.
Piden medidas
Otros enfatizaron en que lo sucedido debe abrir una reflexión para que se tomen medidas y
no se presenten nuevas tragedias.
“Los niños, y más bebés son de mucho cuidado. Es necesario que no se los deje solos nunca”, dijo Fanny Niscue, habitante de la localidad.
Entre tanto, las autoridades locales iniciaron una investigación para determinar lo ocurrido y despejar todos los interrogantes.
Con la misma se pretende establecer si el pequeño era objeto de continuos abandonos o, si por el contrario, fue un caso fortuito.
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