La tragedia por la violencia e inestabilidad política en Tumaco parece una pesadilla sin fin.
Hace escasos minutos, agentes del CTI capturaron en Bogotá al actual mandatario de esa población nariñense; Julio Rivera, y a un contratista.
El funcionario fue detenido en cumplimiento a una orden judicial; por cuenta de una investigación en su contra por presuntos actos de corrupción.
Según la Fiscalía, el mandatario cometió presuntas irregularidades en un contrato de vivienda de interés prioritario.
“Deberán responder por peculado, contrato sin requisitos legales y falsedad en documento”, dijo la Fiscalía a través de Twitter.
TUBARCO conoció que Rivera salió anoche desde el aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón, de Cali, con rumbo a Bogotá.
Hoy, mientras cumplía diligencias, fue sorprendido por los investigadores de la Fiscalía.
PULSO POLÍTICO
Julio Rivera Cortés llegó a la Alcaldía de Tumaco en unas reñidas elecciones atípicas celebradas a principios de 2017.
En ese entonces reemplazó a María Emilsen Angulo destituida por encontrarse inhabilitada.
Arribó al cargo con el marasmo de varias fuerzas políticas, entre ellas la de Cambio Radical y AICO.
CONTRA LAS CUERDAS
Juntos inclinaron la balanza a su favor en contra del barón electoral de Tumaco, Neftalí Correa, también destituido por la Procuraduría.
Paradójicamente, Rivera Cortés proviene de las lides de su hoy contrario político.
Ya que militó en sus toldas cuando fue secretario de Planeación de Víctor Gallo, ahíjado político de Neftalí Correa, exrepresentante a la Cámara.
Su año y medio de gobierno han sido de luces y sombras.
Entre las mayores polémicas que ha asumido se encuentra la sanción que le profirió la Procuraduría.
La misma se dio porque, según el organismo, se extralimitó al sacar de la gerencia del hospital Divino Niño a Carolina Farinango.
En Tumaco es sabido que ese pulso lo ganó Correa quien hizo moñona.
Logró la sanción provisional contra Rivera por tres meses y que un fallo judicial restituyera a Farinango, aliada de Correa.
En los últimos 10 años, al menos cuatro alcaldes de Tumaco; han resultado salpicados en escándalos judiciales y disciplinarios por corrupción.
A pesar que en el país se eligen mandatarios cada cuatro años; por la inestabilidad política, la ciudad ha tenido hasta tres en menos de 12 meses.
Así ocurrió entre mediados de 2017 y arranque de 2018.
