El sistema de transporte que vendría mejorar la movilidad en Cali, y que se ha convertido en un dolor de cabeza: el MIO. Fotos: @tubarconews

El sistema de transporte que vendría mejorar la movilidad en Cali, y que se ha convertido en un dolor de cabeza. Del MIO en Cali se han bajado más de 200 mil pasajeros para usar otros medios de transporte.

Noticias Cali.

Hurtos, trasteos, intolerancia que llevan a riñas, habitantes de calle durmiendo en los buses; daños, estaciones en mal estado o fuera de servicio, y las ventas informales en casi todas las rutas, la suma de todos los males que tienen que vivir a diario miles de usuarios del Sistema de Transporte Masivo de Occidente, MIO en Cali.

En el MIO, los problemas de seguridad han ido en aumento. Foto: @tubarconews

El MIO moviliza a diario a más de 100.000 pasajeros, entre el sur, el norte, el oriente y la ladera de Cali, incluyendo el MIO CABLE. Que también, ha tenido sus problemas poniendo a sufrir a más de 4.000 usuarios al día.

El MIO moviliza más de 200 mil pasajeros actualmente, pero en los últimos años, se bajaron más de 200 mil a buscar otros medios de transporte.

Algunos caleños se preguntan: ¿Cómo sería el servicio del MIO si funcionara al 100%?

Los males de un transporte masivo: MIO «de sueño a pesadilla»

Lo cierto es que son varios los males que aquejan y sufren los usuarios del sistema que conecta a casi toda la ciudad, pero al que el transporte informal le ha ido ganando la batalla.

Aunque el MIO es para algunos caleños su única opción, la falta de cobertura de rutas en algunas zonas de la ciudad y la demora entre un bus y otro, genera molestar.

Muchos, deben esperar más de 45 minutos, una hora o hasta más. Y eso, sumado cada día, dos veces al día que sube a este transporte, es perdida de tiempo para una persona.

Mal estado y otras fallas del MIO en Cali

La desidia y el abandono al que algunas estaciones han sido sometidas es preocupante, uno de los casos más impactantes es el de las estaciones del centro, Santa Rosa, Fray Damian y en otros lugares de la ciudad, por ejemplo la estación de Primitivo.

Estaciones que en el día son poco usadas y en la noche sirven de apartamento para habitantes de calle y hasta refugio de delincuencia común.

La estación Santa Rosa, quedó sin uso. Foto: @tubarconews.

Oscuras, solitarias, sin ningún tipo de seguridad. Incluso, a algunas, después de las 7 de la noche, no llega ningún pasajero, prefieren hacer recorridos más largos y hacer sus trasbordos, en otras.

Eso en el centro, pero el oriente no se salva. La zona que alberga a la mayor mano de obra de Cali tiene su Troncal del Oriente cerrada.

Un proyecto que pretende cubrir las necesidades de transporte desde Menga hasta Universidades, pero que a la fecha aún no está habilitada. De acuerdo con el cronograma del proyecto, la obra de infraestructura debía ser entregada por el contratista (Consorcio MIO TCU-HB) en mayo de 2023.

Con respecto a los buses, en la ciudad constantemente hay reportes de vehículos dañados, con goteras, emanando humo, varados en carretera, sin aire acondicionado, hasta cucarachas viajan en el MIO.

En parte, por culpa de la incultura ciudadana, le gente se sube comiendo, tomando bebidas y hasta llegan a dejar sobras, paquetes.

Además del escándalo de los 900 buses que nunca salieron a circular en la ciudad. Siempre han sido menos de 700.

La inseguridad

Todos los días los usuarios viven al zozobra de la inseguridad dentro de las Estaciones y los buses del MIO. Incluyendo, las filas que deben hacer hasta por más de 45 minutos, para abordar un alimentador en paradas en las calles.

El cosquilleo, la intimidación, discusiones y hasta agresiones que han terminado en tragedias se han vivido en medio de un sistema de servicio de transporte público que no termina de ofrecer seguridad a sus usuarios.

Sin embargo, el pasado 5 de julio llegaron 110 policías al MIO con la esperanza de acabar con la inseguridad en el sistema.

Las autoridades tuvieron que pellizcarse y ponerle frente a las denuncias frecuentes de atracos, intimidaciones y ataques.

El rebusque 

¿Alguna vez ha escuchado la típica frase: «Acabo de salir de la cárcel, podría estar robando o matando, pero no, hoy solo quiero venderles esta galleta»?

Pues ese es el pan de cada día de cientos de pasajeros del transporte azul.

Los que se suban a los buses, los que arman sus emprendimientos en las estaciones, sumado a los artistas que encuentran el MIO una posibilidad para «levantarse la papita diaria».

La intolerancia, falta de cultura ciudadana 

Cali pasó de ser la ciudad cívica para convertirse en un lugar caótico. Los casos de intolerancia entre usuarios y entre conductores son frecuentes y algunos han terminado en tragedia, personas heridas; ya dos fallecidos, y bochornosos episodios. 

El mayor temor, es que un empujón termine en tragedia, como ya ocurrió.

Otros se pasan de agache el pasaje, se meten sin pagar pasajes; atravesándose los carrilles exlusivos y metiéndose por puertas dañadas.

A diario hay cientos de pasajeros colados, arriesgándose incluso a punto de ser atropellados, se han visto habitantes de calle consumiendo sustancias psicoactivas a plena luz del día en las estaciones, viajando y durmiendo dentro de los buses.

También es muy común verlos colgados en la parte posterior o pegados rodando en sus bicicletas.

Y el mismo mal comportamiento de muchos pasajeros, parte del daño en las puertas, se debió a su mal uso, ponerles los pies, trancarlas con palos, recostarse a ellas; hoy casi ninguna estación le sirven las puertas automáticas.

Rutas con buses vacíos 

Otro de los problemas del sistema, que si es necesario en Cali para la gran cantidad de personas que lo necesitan, es la demora en las freciencuas entre rutas.

Algunas son rutas muy largas, donde un recorrido puede durar más de una hora; otras tienen recorridos muy cortos y en algunos casos, hasta de baja demanda.

Por ejemplo, la Avenida 4 Norte la reforzaron con una ruta; la P62A, que si ha tenido buena demanda. Su trayecto entre la calle 5 y la avenida sexta, hasta las Américas, ha sido bien recibida.

Sin embargo, hay otras rutas cuestionadas.

Las mismas autoridades han reconocido los problemas que enfrenta el MIO. Porque ahora, hasta para vender las tarjetas y pasajes, es un lío.

No venden tarjetas del MIO 

En varias estaciones ya no hay servicio de taquillas, ni para vender las tarjetas del MIO, ni para recargar los pasajes, tampoco para vender un solo pasaje.

En muchos puntos, hay taquilleras, pero no venden tarjetas.

"Por mera necesidad": miles de pasajeros del MIO sin garantías y esperando mejoras
Hace meses no se venden con regularidad pasajes individuales y tarjetas del MIO.

Y en varias estaciones, entre ellas la de Estadio que está en el corredor de la Calle 5 con un alto flujo de pasajeros, la máquina de recargas, no funciona bien. No recarga todas las tarjetas.

  • Desde septiembre del 2022 se restringió la venta de pasajes individuales y tarjetas.

De 7000 tarjetas de pasajes vendidas a la semana, más del 40% irían dirigidas a reventas de pasajes, según Metrocali.

Metrocali respondió que lo buscaba era reducir la reventa de pasajes, pero no hubo medidas más flexives y esto terminó impactando a los usuarios del día a día.

Muchos, señalan que la reventa de pasajes, se incrementó debido a que en muchas estaciones y puntos en las calles, no se conseguían pasajes ni tarjeta del MIO.

Esta, es una crisis que ya lleva meses sin soluciones, porque ni la tarjeta personalizada, funciona bien.

Más plata para el MIO

Mientras miles de pasajeros siguen movilizándose entre temores y fallas del sistema, y el mismo MIO se convierte en un ‘fortín’ de lucha política en época electoral, todavía no se ha empezado con el plan de mejorar el sistema tras aprobarse el Proyecto 180.

Se discutió por meses y finalmente en febrero de 2023, fue aprobado en el Concejo Distrital de Cali.

Con entre otras cosas, la sobretasa a la gasolina; buscan generar 1,3 billones de pesos, si, más plata para salvar el sistema, pero la respuesta desde la Alcaldía y Metrocali que presentaron el proyecto, es que no solo para el actual MIO: sino para un sistema de transporte más completo.

Se plantea como el nuevo modelo que busca integrar los distintos modos de transporte como el MIO, MIO Cable, TPC, camperos y el futuro tren de cercanías, para un trabajo articulado «en el que se mejore la movilidad de todos los caleños».

Con el proyecto 180, se dará paso a la constitución de una fiducia para manejar los recursos, se gestionarán los créditos y dentro del plan modelo.

Ya se encuentra un cronograma con que se plantea que a partir de julio este 2023, se inicie un proceso de licitación para la flota pública, que estaría llegando, en 2024.

Integrar el sistema de transporte en Cali: MIO, busetas y otros

Y mientras entonces se concreta ese nuevo modelo de transporte con un MIO mejorado, entre los usuarios crece la desesperanza. Sobre todo, porque muchos, señalan que hay falta de claridad sobre la economía del MIO.

Hay que recordar que el sistema no se sostiene solo, porque incluso, parte de los pasajes se subsidian, de allí, la inyección de recursos permanentes al sistema por parte del distrito.

¿Y quién da cuentas claras?, porque hasta hay deudas con operadores; se suman los daños más común de lo esperado y otros. El MIO le sirve a la ciudad, pero sus sostenibilidad sigue en duda, y en riesgo.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí