May Riascos ha ganado premios y ha viajado por el mundo. Creer, prepararse, tener disciplina, eso hace parte del talento y el éxito.
Noticias Valle.
May nació en Candelaria Valle del cauca, en una familia numerosa, de escasos recursos, pero con las ganas de salir adelante.
Desde muy pequeña se sintió atraída por la música, le gustaba escucharla y soñaba con poder interpretarla.
A sus 12 años llegó a la banda marcial de su municipio, ahí interpretó sus primeros instrumentos, pasando por los platillos, los vientos y finalmente llegando a la percusión.
Se hizo amiga de la trompeta rápidamente, destacándose entre sus compañeros, pero cuenta que un tratamiento de ortodoncia la alejó de este instrumento.
Así llegó al redoblante, que interpretó durante varios años y encontró en la percusión «lo que realmente me llena».
«Quiero que todas las mujeres entiendan que si lo creemos, lo hacemos»
«Costó mucho, costó tiempo, esfuerzo y un poco de carácter.» La presión social y de su familia la llevaron a retirarse de la música para estudiar una carrera «de verdad», dice.
Pues no estaban de acuerdo con que una mujer quisiera ser músico, por que generalmente «las mujeres en estos espacios son sexualixadas.»
Incluso, contó que su primer concierto fue a escondidas, sus compañeros de orquesta y sus profesores fueron a pedir permiso a su casa pero la respuesta fue negativa.
Así que May, tomó la decisión de ir al concierto, «porque quería tocar, era mi primer concierto y además no había nadie más que pudiera hacerlo.»
Finalmente el concierto fue transmitido por el canal local y «todo el pueblo me vio.» Cuando May Riascos, volvió a casa, la tensión fue enorme.
Finalmente y con el paso del tiempo, en su casa aceptaron que esa es su vocación y luego de dejar su trabajo para concentrarse en la música, ha conseguido muchos logros.
Se siente orgullosa de su proceso, de haber viajado por varios países del mundo representando a Colombia, pero especialmente a su pueblo, Candelaria.
