La banda que estafaba con tarjetas de crédito fabricaba sus propias huellas dactilares para suplantar a incautos ciudadanos. Se robaron $1600 millones y operaban hasta en Bogotá.
Noticias Cali
Varios pares de manos falsas se encontraron las autoridades, en medio de los allanamientos que permitieron la captura de una banda que suplantaba a ciudadanos para reclamar tarjetas de crédito.
Se trata de la banda conformada por casi una veintena de personas, incluidos empleados de entidades financieras, los que lideraban el sofisticado modelo de estafa con el que tumbaron a centenares de ciudadanos.
La Policía entregó detalles sobre el modus operandi de la banda a la que denominaron «Los Tarjeteros». La Fiscalía, por su parte, los llamó «Los de la Uno».
Puede leer:
La estafa con tarjetas de crédito y una entidad financiera que se ejecutaba en Cali
El grupo de delincuentes inicialmente seleccionaba a las víctimas para suplantarlas y después reclamar las tarjetas de crédito a su nombre.
Dice un investigador de la Policía que al parecer, desde los archivos de la Registraduría Nacional, los estafadores lograban sacar los registros dactilares de las víctimas.
Posteriormente, se dirigían a tipografías y con un software de alta precisión lograban imprimir las huellas, manteniendo todos los detalles de la imagen.
Lo que resultó más sorprendente para las autoridades es que, con ayuda de químicos, las impresiones de las huellas quedaban hechas en un látex especial. Luego se moldeaba el material y el resultado eran falsas manos con las huellas de las víctimas.
Las manos falsas quedaron registradas en varias fotografías que se tomaron durante el procedimiento.
La operación se hacia clandestina y gracias a la participación de al menos cinco empleados bancarios que digitaban la información según los protocolos de entrega y lograban que en los registros quedara la entrega de la tarjeta como si se hubiera hecho a su propietario real.
Así, y durante varios años, la banda logró hurtar $1600 millones. Serían al menos 400 las víctimas de estafa y suplantación, entre ellos pensionados.
La banda logró llevar su actividad delincuencial a otros municipios del Valle, así como Neiva y Bogotá.
Los detenidos deberán responder por los delitos de concierto para delinquir, acceso abusivo a un sistema informático, violación de datos personales, falsedad en documento privado, hurto por medios informáticos y estafa.
Puede leer: El acosador de mujeres en el MÍO que terminó en la cárcel