Varios audios revelan que «la chicanería» de Jenny Ambuila provocó su captura y la de sus papás.
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«A la gente qué le interesa lo que ella hace». Este es uno de los reclamos que Omar Ambuila, funcionario de la Dian de Buenaventura que terminó en la cárcel por favorecer el contrabando, le hacía a su esposa por «la chicanería» de su hija Jenny en redes sociales.
La exhibición del Lamborghini en Facebook e Instagram detonaron la investigación a la familia. Todos sabían que les seguían los pasos porque Jenny se proclamó como «Influencer».
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Así lo reveló este fin de semana el diario El Tiempo, que conoció detalles sobre la investigación del caso.
Lo hizo con unos audios en los que se escucha a Omar Ambuila y Elba Chará discutiendo por esa situación.
En ellos, se escucha al funcionario de la Dian pidiendo que la hija ponga sus perfiles de Instagram y Facebook en privado.
Escuche aquí los audios revelados por El Tiempo
Además de los audios, se conoció que los Ambuila montaron una inmobiliaria fachada para tratar de justificar los excéntricos gastos que tenían.
Se llama Fares Inmobiliaria. La socias eran Jenny Ambuila y su mamá, Elba Chará.
En ella estaban registradas varias propiedades y sumaba un capital de $1200 millones, según lo revelado por el diario.
En la inmobiliaria estaban registradas dos lujosas propiedades: Un extenso lote en Pance, valorado en $1500 millones; y una casa de más de $500 millones en un exclusivo sector de la ciudad.
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La inmobiliaria, según la investigación, registró un crecimiento inusual en sus ingresos, lo que también levantó sospechas.
Al parecer, este negocio lo utilizaban para pasar el dinero producto del favorecimiento al contrabando que Omar Ambuila hacía en el puerto de Buenaventura.
