La gente llegó hasta el CDI en el barrio Carlos Meisel en Barranquilla, intentaron golpear a un profesor, señalado del presunto abuso, sin embargo, la situación escaló y en la noche y madrugada, aprovecharon para desvalijar y robar.
Noticias Barranquilla.
En el Centro de Desarrollo Infantil Carlos Meisel solo quedaron destrozos y 440 niños y niñas quedaron sin dónde poder recibir atención, porque el CDI quedó destrozados, y no fue solo por un tema de indignación, porque se vio a grupo de personas saqueando, vandalizando y robando el lugar.
Todo empezó el lunes temprano, por una denuncia de presunto abuso sexual a una niña de 4 años de edad, dentro del lugar.
Señalaban a un profesor. Los padres de la menor, llegaron con documentos en mano, a exigir respuestas al persona del centro infantil, pero se empezó a «regar la bola del supuesto violador».
La gente empezó a llegar, enfurecidos exigían que les dejaran al profesor para tomar justicia por mano propia.
Tuvo que llegar la policía, pero esto al contrario exacerbó ánimos. Y todo se descontroló.
La policía tuvo que evacuar al personal y los niños. Mientras, desde afuera un grupo de personas lanzaban piedras. Rompieron puertas y causaron otros daños en este CDI de Bienestar Familiar.
Horas después, se vio a sujetos subidos en el techo robando partes del lugar.
Este martes, la tristeza fue total para el personal del lugar. Encontraron todo destrozado, «porque lo que no se alcanzaron a robar, lo partieron.
Este centro de atención para niños, había sido arreglado hace apenas unos meses.
Patricia Vargas, directora primera infancia distrito de Barranquilla, denunció que hasta platos, ollas y otros elementos de dotación de actividades diarias se las llevaron.
En este momento, no saben a dónde reubicar a los menores.
Vargas, pidió celeridad a las autoridades competentes en la investigación del caso de presunto abuso sexual que condujo a toda la situación.
