Kabosu, el perro japonés que se convirtió en un meme y en el rostro de la criptomoneda alternativa Dogecoin, murió a los 18 años, anunció su dueña en un blog este viernes.
Noticias Internacionales.
Kabosu, el perro de la raza japonesa Shiba Inu que se hizo famoso por ser el rostro del meme «Doge» y la criptomoneda Dogecoin, falleció pacíficamente a los 18 años.
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Su dueña, Atsuko Sato, anunció la noticia en su blog, expresando su gratitud hacia los millones de fans que Kabosu tenía alrededor del mundo. «Falleció en silencio, como si estuviera durmiendo, mientras yo la acariciaba», escribió Sato.
Origen del meme de Kabosu
La historia de Kabosu y su ascenso a la fama comenzó en 2010, cuando Atsuko Sato, quien había adoptado a Kabosu de un refugio en 2008, publicó una foto de su perro en su blog.
En la imagen, Kabosu aparecía sentada en un sofá con una expresión traviesa y las patas delanteras cruzadas. Esta imagen inocente pronto capturó la imaginación de los internautas y se convirtió en el meme «Doge». El meme se caracterizaba por la imagen de Kabosu acompañada de textos en Comic Sans y frases gramaticalmente incorrectas que transmitían una variedad de emociones y pensamientos de manera humorística.
La popularidad del meme «Doge» explotó en foros en línea como Reddit, donde usuarios de todo el mundo comenzaron a compartir la imagen de Kabosu y a crear sus propias versiones del meme.
La transición al mundo de las criptomonedas
En 2013, la fama de Kabosu alcanzó nuevas alturas cuando su imagen fue adoptada como el logotipo de la criptomoneda Dogecoin. Inicialmente creada como una broma, Dogecoin rápidamente ganó tracción y se convirtió en una de las criptomonedas más conocidas del mundo.
El respaldo de figuras influyentes como Elon Musk impulsó aún más su popularidad, y en 2021, Dogecoin experimentó un auge espectacular que hizo millonarios a algunos de sus inversores.
El éxito de Dogecoin demostró el poder de los memes en la economía digital y consolidó el estatus de Kabosu como un ícono no solo del internet, sino también del mundo financiero. A pesar de su nueva fama en el mundo de las criptomonedas, Kabosu siguió siendo el mismo perro gentil y calmado que Sato había adoptado años atrás. «Es muy gentil y calmada. Le encanta ser fotografiada», dijo Sato en una entrevista con The Verge en 2013.
A lo largo de su vida, Kabosu no solo fue una mascota querida, sino también un símbolo de alegría y humor para millones de personas en todo el mundo. La transición de Kabosu de ser un perro rescatado a un fenómeno global es un testimonio del impacto duradero que pueden tener los animales en nuestras vidas. Su imagen, que comenzó como una simple foto en un blog, se convirtió en un lenguaje universal de internet, utilizado para expresar desde humor hasta crítica social.
Kabosu vivió una vida plena y feliz en su hogar en Sakura, una ciudad al este de Tokio. Su dueña, Atsuko Sato, siempre se mostró agradecida por el amor y el apoyo que los fans de Kabosu mostraron a lo largo de los años. «Creo que Kabo-chan era el perro más feliz del mundo. Y yo era la dueña más feliz», expresó Sato en su blog, recordando con cariño los momentos compartidos con su querida mascota.
